El embarazo es, probablemente, unas de las etapas más bonitas y especiales de la mujer. Sin embargo, también supone cambios físicos y molestias.

Los especialistas de Clínica Universidad de Navarra recomiendan una serie de pautas para prevenir o paliar los cambios físicos que se producen durante el embarazo.

No solo ayudarán en el proceso del embarazo, sino que también contribuirán a una recuperación más rápida y completa tras el parto.

Consejos durante el embarazo

1. Aparición de estrías. Las estrías aparecen por la distensión de la piel en senos, vientre o caderas. Aproximadamente entre el 50 y el 70% de las mujeres desarrollan estrías en su primer embarazo a partir del sexto mes. Para esto no existe un tratamiento concreto. Lo mejor es la prevención.

Desde Clínica recomiendan aplicar una crema antiestrías desde los primeros meses de gestación. Habría que hacerlo mañana y noche con un pequeño masaje. Estas cremas contienen principios regeneradores de las fibras de colágeno y elastina, y toda la sustancia de la dermis. Para los casos en los que las estrías ya hayan aparecido, al finalizar el embarazo se pueden tratar con tretonoína tópica al 0,1% o con láser de colorante pulsado. Sin embargo, no es posible su eliminación total.

2. Grietas en los pezones. A partir del sexto mes de embarazo, se aconseja fortalecer el pezón y la aerola. Para ello, habría que aplicar diariamente un poquito de alcohol de tanino. En los casos en los que la piel es sensible, los expertos de Clínica Universidad de Navarra recomiendan alternar con una crema protectora para el pañal.

Por otro lado, durante la lactancia hay que secar el pezón y la aerola antes y después de cada toma para evitar las grietas. Además, los discos absorbentes que se colocan debajo del sujetador pueden ser muy útiles. Si las grietas aparecen, habría que emplear cremas cicatrizantes con extracto de centella asiática o alantoína y que contengan algún efecto anestésico.

3. Cambios en la pigmentación de la piel. Se suelen oscurecer areolas y pezones y la “línea negra” que va desde el vello púbico hasta el obligo. Además, también se oscurecen las zonas genitales y las axilas.

Lo que más puede preocupar es el cloasma, esto es, la pigmentación en la zona facial –mejillas y frente-. Para evitarlo, se recomienda usar crema solar con alta protección. No obstante, suelen desaparecer al año del parto, aunque, también pueden aparecer nuevos lunares.

4. Retención de líquidos. Para evitar las piernas cansadas o hinchadas, los calambres y las varículas se hacen varias recomendaciones:

  • Pasear.
  • No sentarse con las piernas cruzadas.
  • Dormir con los pies en alto.
  • Usar calzado cómodo.
  • Usar medias de descanso.
  • No llevar ropa ceñida.
  • Aplicar duchas frías en las piernas en sentido ascendente.
  • Aplicar geles refrescantes en las piernas.

5. Higiene íntima. Los especialistas también recomiendan emplear jabones especiales para mantener la flora bacteriana de la zona. Tras el parto, durante el puerperio, es importante seguir los consejos del ginecólogo y la matrona.

6. Cabello. Durante el embarazo el cabello se cae menos y tiene más brillo. Sin embargo, tras el parto se cae. Para recuperarlo, desde Clínica recomiendan tener una dieta rica en vitaminas y minerales.

También advierten que los preparados tópicos anticaída pueden ayudar y puede emplearse un champú neutro (dos veces a la semana), usar acondicionador, aplicar mascarilla o vitaminas.

7. Hirsutismo: vello facial y corporal.  Normalmente, aparece más en la cara, piernas, línea alba y espalda, sobre todo en personas de tez oscura. Ese vello suele caerse a los seis meses del parto por lo que no habría que tomar ninguna medida.