La anemia es una afección frecuente en el embarazo.

La anemia no suele presentar complicaciones serias en este periodo prenatal. Sin embargo, sí son importantes tanto la prevención como el tratamiento.

“La incidencia de la anemia en el embarazo varía ampliamente según el criterio empleado para su diagnóstico. Las formas leves son tan frecuentes que han sido consideradas durante mucho tiempo como fisiológicas y, por tanto, no precisaban tratamiento”, señalan los especialistas de Clínica Universidad de Navarra.

¿Cuáles son las causas de la anemia en el embarazo?

Por lo general, el 90% de las anemias en el embarazo son anemias de tipo ferropénico, es decir, por una deficiencia de hierro, ya que las necesidades de este mineral se incrementan por la necesidad de desarrollo del feto y la placenta.

También existen otro tipo de anemias, denominadas megaloblásticas, que son excepcionales o poco comunes en las que existe un déficit de la vitamina B12.

¿Cuáles son los síntomas de la anemia en la mujer embarazada?

Desde Clínica, sus especialistas enumeran algunos signos de anemia:

  • Cansancio.
  • Palidez de la piel.
  • Palidez de las mucosas.
  • Mareos.

¿Cómo se diagnostica?

“Normalmente, el diagnóstico es bastante sencillo de realizar, ya que, a partir de la clínica que puede manifestar la paciente, con un simple análisis de sangre podemos determinar si existe o no existe anemia y este análisis, asimismo, va poder orientar sobre su origen”, indican.

El análisis de sangre, o hemograma, es una prueba que se realiza periódicamente a la mujer embarazada durante todo el embarazo.

¿Cómo puede afectar la anemia al feto?

Los especialistas de Clínica Universidad de Navarra subrayan que “en general, las necesidades fetales no van a sufrir un menoscabo por la deficiencia materna de hierro o de vitamina B12, incluso en presencia de anemias maternas importantes. Sin embargo, habrá de ser cuidadoso en los casos de anemias graves”.

No obstante, cuando las cifras de hemoglobina quedan por debajo de los 7 g.%, desde Clínica recomiendan realizar un consulta al hematólogo. En estas formas graves, puede influir negativamente en la gestación ya que existe un mayor porcentaje de aborto o de parto pretérmino, un aumento de la mortalidad perinatal, un incremento del riesgo de infecciones puerperales, etc.

¿Cuál es el tratamiento de la anemia en el embarazo?

El tratamiento habitual de la anemia en la mujer embarazada es la reposición de elemento deficitario, es decir, hierro en el caso de una anemia ferropénica o vitamina B cuando se trata de una anemia megaloblástica.“Este tratamiento ha de instaurarse en el momento en que se detecta la anemia y debe de mantenerse durante toda la gestación, incluso en los meses posteriores al parto”, subrayan los especialistas de Clínica Universidad de Navarra.