España es el cuarto país del mundo con mayor esperanza de vida (85,6 años de media), según datos de un estudio internacional realizado por la revista The Lancet el pasado año.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en unos treinta años habrá más de mil millones de mujeres con 50 o más de 50 años, el triple que en 1990.

Muchas de estas mujeres tendrán una larga vida por delante, pero su calidad de vida puede verse afectada por enfermedades y desarreglos asociados con la pérdida de estrógenos.

La propia OMS ha solicitado a los países que activen programas de educación para que las mujeres conozcan cómo afrontar esta etapa de la vida y prevenir sus consecuencias. Esta educación y los buenos hábitos contribuyen de forma muy positiva en esta nueva etapa en la vida de la mujer.

Qué es la menopausia

Aproximadamente entre los 45 y 55 años, 51-52 años en países desarrollados, llega en la mujer la menopausia.

Los síntomas más comunes son sofocos, con sensación de calor que surge en el pecho e irradia hacia el cuello y cara, sudoración intensa, sequedad vaginal, quemazón en los genitales, frecuencia y urgencia en la micción, y una mayor frecuencia de infecciones urinarias. También es característica la pérdida de elasticidad de la piel, cambios en la textura, tamaño y consistencia de las mamas. Algunas mujeres sufren episodios de ansiedad, depresión, irritabilidad, pérdida de memoria e insomnio.

Se trata de un periodo fisiológico condicionado por cambios hormonales, en el que cesa de forma permanente la menstruación. Los ovarios dejan de funcionar, cesan las ovulaciones y dejan de producir hormonas, fundamentalmente estrógenos y progesterona.

Este déficit de estrógenos acelera la descalcificación de los huesos y aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

La osteoporosis, precedida por la osteopenia o disminución de masa ósea, es especialmente importante. Puede aparecer rápidamente en los primeros 5 años. Con más tiempo de déficit de estrógenos y sin las medidas adecuadas, se pierde más masa ósea y a los 10-15 años se puede desarrollar la osteoporosis, que se caracteriza por la fractura del hueso. Ser fumadora, hacer poco ejercicio físico, déficit de vitamina D y algunos tratamientos crónicos son también factores de riesgo.

Los especialistas de Clínica Universidad de Navarra valoran conveniente aplicar una terapia hormonal sustitutiva que puede aliviar los síntomas y que, a largo plazo, puede disminuir el riesgo de enfermedad cardiovascular y de osteoporosis.