Si todos los niños y niñas se alimentaran desde su nacimiento exclusivamente de leche materna, se podrían salvar 1,5 millones de vidas anualmente. Así lo afirma UNICEF.

La leche materna se considera el alimento perfecto para el niño durante los 6 primeros meses de vida. Y, hasta los dos años, está indicada de forma complementaria.

La madre, de media, genera un litro diario de leche aproximadamente. Está compuesta principalmente de agua junto con proteínas, grasas, lactosa, sales minerales y vitaminas.

La secreción mamaria se suele iniciar 48 horas después del parto. No obstante, se pone al bebé al pecho a las pocas horas, aunque aún no se haya producido la secreción de la leche.

Beneficios de la leche materna

Especialistas de Clínica Universidad de Navarra indican una serie de ventajas de la leche materna:

  • Contiene inmunoglobulinas, unos anticuerpos que ayudan a prevenir tanto infecciones respiratorias como diarreas. También posee enzimas beneficiosas para facilitar la digestión, la cual puede estar inmadura los primeros meses. A todo esto, hay que sumarle que proporciona los nutrientes necesarios para el bebé.
  • Ayuda a madurar diferentes sistemas gracias a las diversas hormonas que actúan como factores tróficos.
  • Regula la ingesta del bebé, a través de su composición, ya que va cambiando a lo largo de la toma.
  • Favorece el desarrollo del sistema nervioso central y la maduración de su retina. Esto se debe a su composición basada en Omega 3 y Omega 6.
  • Y, por último, a la madre le ayuda a prevenir el riesgo de cáncer de mama y ovarios. Además, reduce la hemorragia posparto y la anemia.