Clínica Universidad de Navarra se ha incorporado al primer ensayo multicéntrico, a nivel mundial, que une inmunoterapia y Parkinson.

Los especialistas buscan desarrollar una vacuna que consiga una evolución más lenta de la enfermedad, para pacientes en fase incipiente.

El desarrollo de la inmunoterapia abre la posibilidad de frenar su progresión y que los pacientes no desarrollen los síntomas que aparecen en los estadios avanzados.

Una vacuna que frene la evolución del Parkinson

La enfermedad de Parkinson es la segunda patología neurodegenerativa más frecuente en España, tras el Alzheimer.  En Europa afecta a más de 1.200.000 personas y se espera que aumente en los próximos 20 años.

El estudio, al que se ha unido Clínica Universidad de Navarra, está dirigido a pacientes de Parkinson en fase incipiente, con un diagnóstico menor a dos años y que no han recibido un excesivo tratamiento farmacológico. Se prevé incorporar a unos 300 pacientes en todo el mundo, de los cuáles 8 ya son tratados en este centro.

Los investigadores buscan combatir la proteína Alfa-sinucleína. Numerosos estudios realizados valoran que la acumulación de esta proteína en el cerebro es un indicador del desarrollo de la enfermedad. “Se piensa que estos agregados que aparecen, y que puede estar dentro de las células, hacen que el funcionamiento de la neurona sea defectuoso y terminen muriéndose”, indican desde la Clínica Universidad de Navarra.

A diferencia de la inmunoterapia activa, en la que se inyecta la sustancia para que el mismo paciente fabrique los anticuerpos, esta investigación internacional se aborda con inmunoterapia pasiva.

Consiste en administrar anticuerpos, por vía intravenosa, a los pacientes que tienen la enfermedad de Parkinson cada 4 semanas y durante un total de 52. Dichos anticuerpos son preparados en el laboratorio.

Si este anticuerpo se muestra eficaz conseguiría evitar la acumulación de esta proteína y, en consecuencia, ralentizaría la progresión del Parkinson. Su detención no permitiría la curación, pero sí mantener la enfermedad en una fase menos incapacitante.

El estudio se encuentra en Fase 2B y, de obtener resultados positivos, podría comercializarse en el futuro: el paciente continuaría la terapia con la misma periodicidad, de forma permanente.

Clínica Universidad de Navarra, la medicina más avanzada frente al Parkinson

Además de este ensayo clínico, Clínica Universidad de Navarra es pionera en investigación del Parkinson e iniciará una segunda línea de investigación para conocer si una estimulación selectiva del núcleo subtalámico, con nuevos electrodos, puede mejorar el control de impulsos.

El trastorno del control de impulsos aparece como efecto secundario del tratamiento farmacológico que necesitan los pacientes.

Asimismo, Clínica Universidad de Navarra es experta en su tratamiento quirúrgico. Realiza desde hace años la Cirugía del Parkinson, una intervención que mejora la sintomatología de los pacientes y permite reducir la medicación.

Sólo ACUNSA incorpora en sus coberturas esta intervención que mejora la calidad de vida de los pacientes de Parkinson. Y es la única compañía de seguros de salud que garantiza a todos sus asegurados el acceso a los ensayos clínicos de Clínica Universidad de Navarra y los resultados que se obtengan en sus estudios.